Estaba trás los arbustos, trás la maleza, tenía un miedo único, no podía esconderse de nosotros. Era cada vez más chica esa criatura, nosotros le temíamos también, huía 1 metro y saltaba cuando nosotros nos acercabamos, era redonda, con poco pelo y unas patitas chicas sin que se le notaran dedos. Era curiosa pero atemorizante a la vez, no sabíamos qué esperar, cómo reaccionar ni qué hacer. Le hablabamos y respondía con gestos y gruñidos monosílabos. De repente dá un salto enorme, esa cosa volaba o qué carajos. Huyó. Se fué en aquella nube. Corremos trás la nube. ¡Qué locos que perseguimos la nube! Decidimos que sería bueno una escalera enorme construir para llegar a la criatura. Nos dió flojera. ¡Qué mierda! La criatura se cayó, la vemos hasta que llega al suelo y rebota y no es pelota. Parece haber perdido el miedo y ahora jugamos con ella, se llama Caricatura y nos cuenta chistes.
jueves, enero 11
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2 comentarios:
wacha, el arbolito.
Interesante, en verdad que es muy interesante, podría ser cualquier cosa.
el motivo por al cual buscarla o seguirla, su prosedencia, etc.
igual y es lo que todos seguimos.
Un saludo.
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