blogs que no leo pero que están bonitos

domingo, julio 29

risas, y qué más

Contraataca, el sonido contraataca, las letras fluyen como aves por el cielo. El cielo que se nubla, como se nubla una mirada perdida, definitivamente la mañana suena como si fuera para abajo, hora de dormir con mi pareja. Pero ya estamos durmiendo, y esas mentiras van como si quisieran tocar el cielo, y los cuchillos son mentiras, de verdad que así suena nuestro esófago.

No llores por que no esta. Descompuesto. Rechina, quiere explotar. Le gritan todos. Quiere explotar. Le gritan todos. Se confunde AMPLIAMENTE. Le aplauden. Es un dolor vago que me circula.

Bienvenido a la máquina. ¿Qué tenemos que hacer? Formar una alianza en contra de todo. Y el sentimiento escalando montañas como cuando se derriban las luces en la noche. Apagandose: Una por una. Sigue confundiéndose una vez más, para la máquina. Y gritan aturdidos de sus propios gritos. Nunca aprendieron a negar confundidos con sus propios estilos de crecimiento.

Vaya, que sincronía, los insectos. El zapato. El endemoniado zapato matando a todos. Las agujetas gritan un poco más que asesinen a todo su relieve. Esos insectos si que gritaban de dolor. Una nave, es algo. Algo que no se puede dejar así nomás. Una bienvenida única al mundo.

Eso me dijo que no te dijera antes de que crecieras, eso cree que eres una gran estrella, eso me hace pensar que eres una gran estrella brillante, por eso eres bienvenido a la máquina. Colinda.

Y viene, un estornudo tras otro. Cuanto mas crece la vida más crece el dolor, dolor en vano. Cosmogonía. Nunca más de tus labios saldrá, porque estás muerto, muerto e inherte como cualquier objeto que se observa.

Una vez más. ¡Deja de silbar!

¿De qué te ríes?

Siempre tu rostro estuvo ahí, mirando el cielo, comiéndose el viento, respirando la ternura. Lo caliente de las baquetas en la tarde.

Todo.

sábado, julio 28

la mujer que está al revés

Esta es la historia de una mujer que está al revés. Usa cada zapato en el pie equivocado y hacia atrás, camina siempre para atrás y con los ojos quietos y cerrados, cuando parpadea entonces tiene que abrirlos y volverlos a cerrar rápidamente. Habla hacia adentro y cuando estornuda se le llenan los pulmones de mocos.

En vez de escuchar música, la música le sale por los oídos. Maneja en reversa por las banquetas. Cuando una mosca molesta su nariz a ella le agrada tanto que la deja vivir. Cuando saca la basura el basurero nunca pasa, y los días que pasa el basurero, la basura no es basura, son cosas funcionales como escritorios o jarrones chinos. Cuando escribe lo hace con el lápiz al revés, pero aunque pusiera bien el lápiz, nunca se escribiría nada, porque simplemente su lápiz está al revés; el grafito es la madera y la madera es el grafito (a veces toma una hoja y trata de escribir sobre un lápiz).

Muchos se confunden con ella, pero ella va tan normal. El Sol para ella es la Luna y viceversa. Muchos saben qué ropa usa porque sus etiquetas están a la vista. Aunque para ella vestirse es estar desnuda, la verdad es que cuando está desnuda está vestida. Lee los libros volteados. Usa el teléfono al revés pero nunca llama a nadie, solo se pone a hablar al revés marcando los números al revés. Sus párpados están volteados y sus ojos, sus ojos son lo más impresionante: Están en negativo.

En invierno se pone ropa de verano y en verano se pone unas chamarras enormes. Dicen algunos que besa al revés, con la boca volteada. Cuando tiene problemas es que todo está bien y si esta de lo más normal comprando el diario que leerá en seguida al revés es que todo le va mal. Duerme bajo la cama con los ojos abiertos y no, ella no sueña, lo vive. Cuando la veas sonriendo por ahí va en realidad soñando al revés.

Se peina de una manera inexplicable. Comienza sus cigarros desde el filtro. Cuando come es en verdad asqueroso, está prácticamente vomitando todo en el plato. Ni se diga cuando bebe agua. Sus dolores le crean orgasmos y los orgasmos le duelen. Si es no, no es si. Los deportes no son lo suyo, nunca sabe en que equipo va. Prefiere estar sola con mucha gente al rededor.

Es toda una dama, si le pides una sonrisa puede que te ponga cara triste. No se debe intentar consolarla porque está feliz. Conviene que se enoje contigo porque comienza a ser tan amigable. Normalmente te trataría mal cuando está bien contigo.

Es una completa contradicción. Una completa incompleta. Su cielo es suelo. Las nubes son manchas de aceite. Se encuentra en un mundo medio donde nadie se conoce. Es un desastre.

nota pequeña: Sin ofender amigas, es una mujer al revés: hombre. Soy un desastre.

viernes, julio 27

no me gustaba esa esquina

el cielo estaba destructor

miércoles, julio 25

visiones

No te entretengas, a veces es probable que todo explote y no, esta vez no. O tal vez, es cuestión del clima, de los orgasmos. De la gravedad cero. Aprovecha al máximo tus secretos, te diré un secreto, fue maravilloso, pero al día siguiente. Al día siguiente todo estaba recorrido y me dolía y nadie va a entender.

lunes, julio 23

este es el título menos desconcertante que pueda existir, aunque no sé si un título pueda ser desconcertante

Se piensa, yo lo sé, que detrás del espejo hay algo más. ¿Qué hay? Solo un mundo contrario al nuestro. Una vida en viceversa que miente al crear el reflejo. René: En verdad tienes 18 años menos de la edad a la que te vas a morir cuando te ves en el espejo.

Vaya, que alivio. Me veré joven aún. Pero por dentro, no quiero ni pensarlo. Sería una hipocresía pensar que estaré como si nada de humo hubiese pasado por mis pulmones. No es precisamente humo de los incendios forestales. Que vida que me toca vivir.

A veces me hace unas preguntas tan atrevida, tan llena de vida la vida. Son cosas que al sentirlas te erizan la piel, preguntas sin respuestas. Son en verdad algo que te pone a pensar, pero pensar no pensar del pensamiento. Pensar. Que corta es la vida cuando en verdad son años los que tienes que pasar. Y así. Lentamente el tiempo continua.

Lento. Realmente lento. No sé si se den cuenta pero llevo aproximadamente 1 minuto escribiendo todo esto. No te detengas, sigue leyéndole al niño. Va a comenzar a llorar y eso no es lo que tu quieres. El histerismo ya va a llegar, prefieres esconderlo. Ocultarlo mientras todo se contempla, mañana ya no será un gran día. Sería el día de vivir más como si fuera un día común, a uno donde las paredes se te acercan y todos te gritan tu nombre sin saber.

Algo que los espera está siempre detrás de la puerta. No.

No puedo estar haciendo esto, esto que corre por mis venas, esto que cubre mi cabello. No.

Todo aquello no es lo nuestro, lo mío, lo opuesto, es un efecto único que opaca lo demás. No.

Te lo digo porque ayer que me metí al espejo, no me podía salir como lo hice antes. Antes de todo el temblor, el huracán, el tornado. Sí, es adecuado: El tornado.

Creo que lleva un poco de polvo.

No.

el conejo pendejo, nejo

Disculpen si el volumen esta alto, pero es que estoy escuchándote hablar tan fuerte que a veces te entrometes con los tambores, y las guitarras, y los soniditos que se conocen durante una canción. Cada sonidito platicando con otro sonidito (los soniditos tienen que ser en cantidad números pares porque entonces no funcionaría), mientras ellos platican, tú también platicas.

Y bien sabes cuánto odio le tengo a que platiquen al mismo tiempo. Mejor esperemos el proceso decisivo. Un cuchillo o simplemente el conejo comiéndose los cables.

domingo, julio 22

yo estaré ahí para ensuciarte

Estos pies cortan el suelo, qué les importa, digo, siempre quieren al núcleo llegar, pero a veces me hundo tanto en esto que no sé. Siento temblar.

Ya.

Estoy.

Por.

Llegar.

Yo soy el rey de tus ideas, miras como esa tormenta mira tu rostro. Mira a tus ojos desde el polvo y llegas a un pueblo. Usas tus labios. Tus pies, tu cuerpo. Es necesario moverte. Siento temblar.

De.

Nuevo.

No estoy de acuerdo.

jueves, julio 19

mil casas tienen goteras

Está lloviendo. Va la gota cayendo, primero ve la ciudad, decide donde caer, se desliza por el viento, aveces choca con otras gotas y esta se hace enorme y luego más chica, algunas caen en los arboles, otras deciden caer en los edificios, en las ventanas, en los autos, en las vías del tren, en el tren, en las calles, en los paraguas. Otras más se hacen mayoría e inundan ciudades completas, desbordan ríos, se mezclan con la tierra y hacen lodo que ataca a los niños que minutos antes se bañaban con sus amigas gotas. Las gotas mas tranquilas son las que se van deslizando por las paredes, lentamente mientras vienen otras paranoicas y chocan con ellas, aceleradas, algunas golpean con rayos de luz y crean un arcoiris que deshace los cielos con su curvatura.

Y pasan otras mas y saludan el arcoiris mientras este les dice que se relajen, que luego ellas crearán otro como él. Pero tenían que esperarse al ciclo del agua, entonces decidieron no subir nunca más para no crearlo. Otras torpes subieron y lo hicieron, y también llovieron y cayeron sobre banquetas por donde pasaban niños con zapatitos. Había algo formal cerca, pero no tan formal como las gotas que se escapaban por las alcantarillas de la ciudad y marchan después bajo ella. Con un paso singular mezclándose con cucarachas y ratas y cosas de alcantarilla. Otras gotas un tanto despistadas querían caer sobre el auto que iba a gran velocidad por la calle pero estas caían sobre la mano del conductor que sobresalía un poco por la ventana hasta que se sube el vidrio y empiezan a caer en el auto a gran velocidad que va por la calle, entonces deciden caer en la calle que va dejando por atrás porque el auto ha entrado a un túnel. Entonces atacan la oscuridad de la noche como si el carro ya no existiera.

Ahora se van y se mojan ellas mismas a escondidas de nosotros.

~

A veces guardo las palabras detrás de tu oreja para que las escuches cuando yo no este. Y ya no saber qué piensas. De mi, de todo.

lunes, julio 16

tu risa empieza a irritarme

No es que no tenga un tema, es solo que tengo algo que decir. No estás aquí por casualidad. Que yo tenga algo que decir es por que TENGO algo que decir, pero no sé como decirlo. Esperar para esperar, no tengo nada que esperar. Hoy, cuando tu piel crezca, después todos afuera en un infierno lleno de explosiones. Respira, sigue respirando, nada que perder, que envidia me das. Descargas y gente joven, compañeros, respira. ¿Sigues respirando? No puedo fingirte como siempre lo hago. Dices que soy una neblina que cubre tus ojos como cielos. Necesito que me entiendas y cuando tengo algo que decir, a veces solo necesito tiempo para reconocer esos dedos que huyen por todo mi cuerpo y a veces atraviesan montañas, otras veces ríos. Tal como lo querías. Quizás este un poco ido con el sonido.

Electrocutame.

Digo, no es mi problema si lo haces. A diario. Dejame toser agusto.

martes, julio 10

lengua apetitosa

Ya no tienes nada que decir cuando te dejas caer por todo lo que he soplado, he dicho, no te entiendo más. Te sacudes en vano de tus penas y al caer dejas el polvo correr sobre tu vello pero tampoco los bichos te tienen miedo. Debes estar de acuerdo, eso debajo de ti que toma tu forma, poco a poco te construye una vivienda. Todo te grita que te estremezcas, que huyas, que te quedes. A veces haces caso, tus ojos se voltean lentamente hacia adentro y tu boca se abre tanto que tu lengua esta para temerse, pero se ve apetitosa. Cada vez siento como que te tragas a ti misma y no hay a donde hacerse, no hay espacio que puedas dejar libre, porque siento que explotarás de pronto y me dejarás embarrado de ti y no estará tan mal.

Y las paredes, todo se mueve, los cuadros hacen como que vuelan pero en realidad tienen unas patitas que les ayudan a caminar, son invisibles, qué coraje, el closet se abre y se cierra. Todo lo que nos atrapa se hace parte de nosotros. Nosotros somos parte de todo esto que nos atrapa y nos ayuda a no ser mas que pintura o porquería. Ya no puedo más con tanto peso encima, el techo y el abanico se aproximan. La luz se apaga y todo se viene abajo y de repente desapareces sin decir adiós. Y me fijo bien, prendo alguna luz que apareció porque quise y, como que por ahí te veo. No eres más que un bulto de ropa. Ropa sucia.

Pero todavía tienes una lengua apetitosa. Qué puedo decir, tal vez sea una manga de una camisa de invierno.